Informe
de Perfil.com
Economía
El drama que se vive en la
Patagonia
Campesinos piden ayuda para paliar las consecuencias del
volcán Puyehue. Cómo afectó al ganado.
29.09.2011 | 07:21
Una postal que duele, lo que dejó
el volcán | Foto: DyN.
Dirigentes
rurales reclamaron hoy mayor asistencia económica del Estado Nacional para
ayudar a recuperar a los productores ovinos de la Patagonia afectados por la
caída de cenizas del volcán chileno Puyehue y por la sequía.
"El
gobierno nacional debe poner fondos en estos productores para que puedan
recuperarse", afirmó el presidente de CRA, Juan Carlos Goya, quien
calificó de "sumamente grave" la situación que atraviesa el sur del
país, especialmente Río Negro y Chubut.
Goya y los
titulares de la Federación de Sociedades Rurales de Chubut, Ernesto Siguero, y
de la Federación de Sociedades Rurales de Río Negro, Luis Sacco, estimaron que
la recuperación de los pastos para volver a la situación previa a la sequía
demandará entre 6 y 7 años.
En conferencia
de prensa, los dirigentes rurales hicieron un balance a cuatro meses de la
erupción del volcán Puyehue, e ilustraron con fotos las consecuencias de las
cenizas sobre los campos de las zonas más afectadas, y sobre las ovejas que
sufren lesiones tanto en las vías respiratorias como digestivas, quedan ciegas
y muchas de ellas finalmente mueren.
Si bien no se
cuantificó el número de animales muertos por consecuencia de las cenizas,
Siguero precisó que en Río Negro "nunca es menor al 30 por ciento de la
carga animal total del campo afectado, y en algunos casos llega hasta el 80 por
ciento". No obstante, puntualizó que antes de la sequía -que la región
padece hace cuatro años- había un rodeo de 4,5 millones y ya murieron por lo
menos 1,5 millón de ovinos.
Por su parte,
Sacco indicó que en Chubut la mortandad por las cenizas oscila "del 15 al
80 por ciento de la hacienda" y sostuvo que la sequía provocó una pérdida
de 55 por ciento en el ganado vacuno, y de 30 por ciento en el ganado ovino.
Goya destacó que desde el principio de la erupción del volcán chileno tanto el
gobierno nacional como los provinciales repartieron forraje y brindó asistencia
financiera a través de los fondos contemplados en la ley de Emergencia (Río
Negro recibió 10 millones, y Chubut 5 millones).
Sin embargo,
remarcó que esa ayuda "es insuficiente" y planteó que "la
magnitud del problema va a llevar más tiempo del previsto" y requiere de
un mayor "aporte económico y planificación del Estado para acompañar al
productor, al que le va a llevar 4 ó 5 años por lo menos para que vuelva a
estar productivo nuevamente". El dirigente aseveró que "el productor
está dispuesto a seguir con lo que le queda, y lo que necesita es una
asistencia económica porque está perdiendo todo lo que tiene".
El dirigente insistió
con la necesidad de "asistencia efectiva en términos económicos" para
ayudar a toda la categoría de productores, a los grandes para que puedan
conservar la mano de obra ocupada y puedan afrontar los gastos que ocasionan
estos movimientos (forraje, fletes, etc), a los medianos y a los pequeños
porque sus ingresos son mínimos dado que la lana que se logra obtener de las
ovejas afectadas por las cenizas "son sucias, rinden poco y valen
menos".
En este
sentido, lamentó que los productores ovinos de la Patagonia no pueden
"aprovechar el buen momento" del mercado internacional de lanas que
registra una recuperación de precios importantes ante la gran demanda que hay,
indicó la agencia DyN.
Los dirigentes
reconocieron la importancia de la ley ovina que dispuso de 80 millones para
asistir al sector, pero alegaron que los fondos demoran en llegar a los
productores 3 ó 4 meses y que la norma "fue pensada para una etapa de
crecimiento, no para una etapa de crisis".
"Se
necesita una velocidad de respuesta absolutamente distinta que la que pueda dar
la ley ovina", subrayó Goya, en tanto Siguero sugirió que "debiera
haber un comité de crisis y abordar en forma inmediata con fondos nacionales o
provinciales". Goya consideró también que una rebaja a las retenciones que
hoy tiene la lana (entre 5 y 10 por ciento), como propone la Sociedad Rural
Argentina, sería un "paliativo si la baja va a ir directamente al precio
que recibe el productor" pero "no se soluciona la cuestión".
"Se
necesita una batería de medidas, y no una sola de estas que está vinculada con
la comercialización de esa lana, y los problemas están, antes de la
comercialización, en la subsistencia de la hacienda", concluyó.