ANO
117 Nº 318 - PORTO ALEGRE, SEGUNDA-FEIRA, 13 DE AGOSTO DE 2012
Retroceso
en la pecuaria gaucha
Con la seca y el alza
en los precios de la soja, especialistas preveén reducción en el nacimiento de
terneros.
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La previsión de un nuevo avance de la soja,
impulsado por el alto precio, sobre áreas ganaderas en la mitad sur, en la
mitad norte y en los campos de Cima da Serra en la zafra 2012/2013,generará
efectos que serán sentidos a partir de setiembre en los nacimientos de
terneros, que deben mermar hasta un 20 % en comparación con 2011, cuando la
soja avanzó en 36.000 hectáreas. Además del área cedida a la agricultura, ese
retroceso será influenciado por la sequía. Según especialistas, las vacas que
parirán en la primavera se han alimentado de pasturas de mala calidad. Una
evaluación del Irga señala hasta 300 mil hectáreas con la oleaginosa en áreas
de arroz. El rebaño de bovinos viene cayendo en el Estado. Desde el año
pasado, la reducción fue de un 2,75 % alcanzando en la actualidad a 13,58
millones de cabezas. El profesor de la Universidad Federal de Rio Grande Del
Sur (Ufrgs), José Piva Lobato, sostiene que, con el entusiasmo por la soja,
mucha gente no estará dispuesta a esperar hasta 18 meses entre gestación,
desmame y engorde para obtener un ternero para abasto.”Si las vacas sales de
la colina, tendrán que competir con la forestación, donde el área será menor
y el suelo es de baja calidad. Y ¿ que hacemos con los frigoríficos que ya
están con capacidad ociosa de faena?”
La situación debería
agravarse en el 2013, si se confirma el crecimiento de áreas con soja, afirma
Pedro Marques, de Nespro/Ufrgs.”Con menor área,cae la productividad y menor
será el numero de vacas entoradas.” En consecuewncia, con una menor oferta de
terneros, el precio debe subir. En este otoño, el Esytado registró R$ 4,10
por el kg de ternero, contra R$ 3,80 de la zafra pasada.
Para mantener la
producción de terneros, Marques propone la intensificación de la integración
agricultura-ganadería con ajuste en la carga animal. Hoy, considerando cada
unidad animal de 450 kilos, la carga promedio es de 0,99 unidades por
hectárea, cuando podría ser de 0,5 a 0,7.”Con el alto precio de los
commodities, el confinamiento no es la solución porque encarece, pero los
granos pueden ser usados como suplementación en caso de precios favorables.”
Lobato sugiere la
reducción de la edad de abasto del ganado y la anticipación del primer
entore. El observa que el rebaño gaucho tiene 1,33 vaquillonas de 25 a 36
meses, y que el 9,78 % no se preñan a los dos años. “Cada 100 vacas, tenemos
55 terneros, eso quiere decir que 45 hembras no cumplieron su papel.”
Para el presidente
de la Federacite, Carlos Simm, en forma diferente a Campanha, donde hay
límite para el cultivo debido a la delimitación de la zona agrícola, en el
Norte y en los Campos de Cima de Serra, hay vocación agrícola y suelo
adecuado para soja , maíz y trigo. Señala que las vacas que producen terneros
están siempre en las periferias de los campos, que no tienen la misma
calidad, con menor oferta de forrajes. “En verdad, por la baja calidad,
serían necesarias más áreas en hectáreas para la misma cantidad de vacas”.
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