| EDICION IMPRESA | Martes, 12 de Febrero de 2013
Uruguayos ya explotan el 12,5% de las tierras ganaderas en Paraguay
Unas 2 millones de hectáreas manejan los uruguayos en el país. Principalmente están diseminados en la zona chaqueña. Los productores manejan elevada tecnología que les ayuda a sacar ventajas del suelo paraguayo.
Por David González
david-gonzalez@uhora.com.py
En un poco más de 15 años, los productores pecuarios uruguayos han aumentado sus negocios en el país, adquiriendo tierras para la explotación ganadera con elevada tecnología. Esta expansión lleva a una ocupación del 12,5% del área destinada a la ganadería en el país.
Según fuentes de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), existen entre 1,8 a 2 millones de hectáreas manejadas por productores uruguayos, esparcidos por el Bajo, Centro y Alto Chaco. La superficie destinada a la explotación ganadera en el país asciende a 16 millones, según datos del último Centro Agropecuario Nacional.
Esta migración no es casualidad. El empresario multimedios del segmento rural, Martín Olaverry, en contacto con ÚH, comentó que en Paraguay existen varios factores que seducen a los productores uruguayos. Entre ellos, la baja carga impositiva registrada en Paraguay, ya que en Uruguay, los productores deben pagar el 25% sobre la renta, además de otro 10% de aporte jubilatorio, tasas para la lucha contra la aftosa y el Instituto Nacional de Carnes y el destino de fondos para viviendas rurales. Mientras que en Paraguay el ganadero paga Imagro, o en algunos casos Iracis y la carga no llega al 10%.
Otro factor importante a tener en cuenta es el costo de la tierra. Cuando llegaron los primeros uruguayos en la Región Occidental, el precio de la tierra oscilaba entre USD 30 a USD 100 la hectárea; hoy llega a promediar entre USD 400 a USD 800 la hectárea, mientras que en Uruguay, las propiedades netamente ganaderas están entre USD 3.000 y USD 3.500 la hectárea y, en caso que cuente con aptitudes para la agricultura, puede elevarse a USD 7 y USD 10 mil, indicó Olaverry.
A su vez, Rodrigo Artagaveythia, director de la empresa Estudio 3.000 en Paraguay, quien fue uno de los primeros en venir al país a invertir en este segmento en 1995 y, que a partir de aquella época, ha ayudado para que otros más vengan a producir en el Chaco paraguayo, dijo que existe una dinámica de inversión y de precios que sigue en expansión en la zona chaqueña.
Agregó que si bien el precio de la tierra ha venido incrementándose en torno a un 20% anual en la zona de la Región Occidental, cada vez más siguen llegando más inversionistas interesados en apostar a la producción en el Chaco.
VENTAJAS. Olaverry dijo que otra ventaja importante de producir en Paraguay está dada al costo de producción. Entre insumos y gasoil, hacer ganadería en el Chaco cuesta entre 50 y 60% más barato que en Uruguay. Agregó que otro factor tenido en cuenta es el precio del ganado, ya que, pese al escenario aftósico en Paraguay, los precios registrados en Uruguay estaban iguales o por debajo de los niveles de cotización que en Paraguay.
En Uruguay también no existen muchas oportunidades de seguir expandiendo la actividad pecuaria, por una limitación natural, además de la presión de la agricultura, que va ganando terreno sobre campos ganaderos, principalmente respaldada por argentinos y brasileños que apuestan a la soja y el maíz en el país rioplatense.
Tanto es así que una frase común en Uruguay dice que con "Artigas (José G.) llegó la ganadería a Uruguay y con Cristina (Kirchner), la agricultura", relacionando a la mandataria argentina, con la migración de argentinos que abandonaron su país para invertir en rubros agrícolas.
Artagaveythia indicó que existen muchas empresas que están ingresando al negocio, con el objetivo firme de producir, dejando de lado las especulaciones. Agregó que en Uruguay logran generar una producción de carne por hectárea de 100 kilos, mientras que en el Chaco, 160 o 170 kilos por hectárea.
Los productores charrúas, de tradición ganadera, van incorporando nuevas tecnologías en este segmento, donde Paraguay tiene aún mucho por crecer. A la vez, mediante la producción en campos donde anteriormente no se utilizaban, están ayudando a dinamizar la economía local.
En términos generales, en Paraguay existen unas 7,4 millones de hectáreas, principalmente manejadas por colonos brasileños, que cuentan con 4,5 millones de hectáreas, explotando agricultura en la Región Oriental y, ganadería en la Región Occidental, según la investigación "Extranjerización del territorio paraguayo", realizado por Marcos Glauser.
EL MODELO EXPULSA A CAMPESINOS
La producción a nivel empresarial genera un proceso que comienza con el arrendamiento de pequeñas fincas, continúa con la compra de inmuebles y termina arrinconando a la agricultura familiar en bolsones aislados, con escasa posibilidad de sobrevivencia, dándose el sistema de los agronegocios, que es poco recomendable, según el exministro de Hacienda, Dionisio Borda.
El exministro de Hacienda señala que la expansión acelerada de los agronegocios y la ausencia de una política de apoyo a la agricultura familiar están reproduciendo la pobreza en el campo.
Si bien es cierto que se han implementado políticas sociales focalizadas para reducir la pobreza rural en los últimos años, las mismas no han sido acompañadas por políticas de fortalecimiento de la agricultura familiar.
RAZONES DE LA INVASIÓN CHARRÚA
1- Bajos impuestos en Paraguay, comparativamente a la carga impositiva en Uruguay.
2- Reducido costo de la tierra en Paraguay. Nueve veces más cuestan las tierras en Uruguay.
3- Presión de la agricultura. Los argentinos van a invertir en rubros agrícolas en Uruguay, desplazando a la ganadería.
4- Costo de producción. En Paraguay cuesta 50% más barato que en Uruguay.
5- Pocas oportunidades para la expansión en Uruguay.
6- El precio del ganado se mantuvo en Paraguay, pese a la aftosa.
david-gonzalez@uhora.com.py
En un poco más de 15 años, los productores pecuarios uruguayos han aumentado sus negocios en el país, adquiriendo tierras para la explotación ganadera con elevada tecnología. Esta expansión lleva a una ocupación del 12,5% del área destinada a la ganadería en el país.
Según fuentes de la Asociación Rural del Paraguay (ARP), existen entre 1,8 a 2 millones de hectáreas manejadas por productores uruguayos, esparcidos por el Bajo, Centro y Alto Chaco. La superficie destinada a la explotación ganadera en el país asciende a 16 millones, según datos del último Centro Agropecuario Nacional.
Esta migración no es casualidad. El empresario multimedios del segmento rural, Martín Olaverry, en contacto con ÚH, comentó que en Paraguay existen varios factores que seducen a los productores uruguayos. Entre ellos, la baja carga impositiva registrada en Paraguay, ya que en Uruguay, los productores deben pagar el 25% sobre la renta, además de otro 10% de aporte jubilatorio, tasas para la lucha contra la aftosa y el Instituto Nacional de Carnes y el destino de fondos para viviendas rurales. Mientras que en Paraguay el ganadero paga Imagro, o en algunos casos Iracis y la carga no llega al 10%.
Otro factor importante a tener en cuenta es el costo de la tierra. Cuando llegaron los primeros uruguayos en la Región Occidental, el precio de la tierra oscilaba entre USD 30 a USD 100 la hectárea; hoy llega a promediar entre USD 400 a USD 800 la hectárea, mientras que en Uruguay, las propiedades netamente ganaderas están entre USD 3.000 y USD 3.500 la hectárea y, en caso que cuente con aptitudes para la agricultura, puede elevarse a USD 7 y USD 10 mil, indicó Olaverry.
A su vez, Rodrigo Artagaveythia, director de la empresa Estudio 3.000 en Paraguay, quien fue uno de los primeros en venir al país a invertir en este segmento en 1995 y, que a partir de aquella época, ha ayudado para que otros más vengan a producir en el Chaco paraguayo, dijo que existe una dinámica de inversión y de precios que sigue en expansión en la zona chaqueña.
Agregó que si bien el precio de la tierra ha venido incrementándose en torno a un 20% anual en la zona de la Región Occidental, cada vez más siguen llegando más inversionistas interesados en apostar a la producción en el Chaco.
VENTAJAS. Olaverry dijo que otra ventaja importante de producir en Paraguay está dada al costo de producción. Entre insumos y gasoil, hacer ganadería en el Chaco cuesta entre 50 y 60% más barato que en Uruguay. Agregó que otro factor tenido en cuenta es el precio del ganado, ya que, pese al escenario aftósico en Paraguay, los precios registrados en Uruguay estaban iguales o por debajo de los niveles de cotización que en Paraguay.
En Uruguay también no existen muchas oportunidades de seguir expandiendo la actividad pecuaria, por una limitación natural, además de la presión de la agricultura, que va ganando terreno sobre campos ganaderos, principalmente respaldada por argentinos y brasileños que apuestan a la soja y el maíz en el país rioplatense.
Tanto es así que una frase común en Uruguay dice que con "Artigas (José G.) llegó la ganadería a Uruguay y con Cristina (Kirchner), la agricultura", relacionando a la mandataria argentina, con la migración de argentinos que abandonaron su país para invertir en rubros agrícolas.
Artagaveythia indicó que existen muchas empresas que están ingresando al negocio, con el objetivo firme de producir, dejando de lado las especulaciones. Agregó que en Uruguay logran generar una producción de carne por hectárea de 100 kilos, mientras que en el Chaco, 160 o 170 kilos por hectárea.
Los productores charrúas, de tradición ganadera, van incorporando nuevas tecnologías en este segmento, donde Paraguay tiene aún mucho por crecer. A la vez, mediante la producción en campos donde anteriormente no se utilizaban, están ayudando a dinamizar la economía local.
En términos generales, en Paraguay existen unas 7,4 millones de hectáreas, principalmente manejadas por colonos brasileños, que cuentan con 4,5 millones de hectáreas, explotando agricultura en la Región Oriental y, ganadería en la Región Occidental, según la investigación "Extranjerización del territorio paraguayo", realizado por Marcos Glauser.
EL MODELO EXPULSA A CAMPESINOS
La producción a nivel empresarial genera un proceso que comienza con el arrendamiento de pequeñas fincas, continúa con la compra de inmuebles y termina arrinconando a la agricultura familiar en bolsones aislados, con escasa posibilidad de sobrevivencia, dándose el sistema de los agronegocios, que es poco recomendable, según el exministro de Hacienda, Dionisio Borda.
El exministro de Hacienda señala que la expansión acelerada de los agronegocios y la ausencia de una política de apoyo a la agricultura familiar están reproduciendo la pobreza en el campo.
Si bien es cierto que se han implementado políticas sociales focalizadas para reducir la pobreza rural en los últimos años, las mismas no han sido acompañadas por políticas de fortalecimiento de la agricultura familiar.
RAZONES DE LA INVASIÓN CHARRÚA
1- Bajos impuestos en Paraguay, comparativamente a la carga impositiva en Uruguay.
2- Reducido costo de la tierra en Paraguay. Nueve veces más cuestan las tierras en Uruguay.
3- Presión de la agricultura. Los argentinos van a invertir en rubros agrícolas en Uruguay, desplazando a la ganadería.
4- Costo de producción. En Paraguay cuesta 50% más barato que en Uruguay.
5- Pocas oportunidades para la expansión en Uruguay.
6- El precio del ganado se mantuvo en Paraguay, pese a la aftosa.
Fuente: ULTIMAHORA.COM